Nuestro organismo utiliza una serie de mecanismos internos para regular la temperatura. Aun así, es necesario tomar ciertas medidas de prevención para que el calor no te pase la cuenta. ¡Chequea estos tips!

¡Mantente hidratado!: 

• Una persona debe consumir al menos 2,5 litros de líquido al día si es hombre y 2 litros si es mujer, y este requerimiento aumenta con el calor. Por eso, procura portar una botella de agua a lo largo de tu jornada.
• Evita la sed. Si la sientes, es porque ya presentas algún grado de deshidratación.
• Si vas a hacer ejercicio físico, puedes elegir durante la mañana o la tarde cuando no haga tanto calor. Recuerda hidratarte antes, durante y después.
• Las bebidas azucaradas y el alcohol pueden hacer que pierdas más líquido corporal, aumentando la deshidratación. Por eso, prefiere el agua de la llave y mineral.

¡Aliméntate adecuadamente!:

• Para sentirte más liviano, opta por alimentos frescos y que ayuden a reponer las sales minerales que pierdes con el sudor, como frutas y verduras.
• Si te gusta el pescado y los mariscos, revisa que estén bien cocidos para prevenir intoxicaciones. Recuerda que el limón no mata los microorganismos dañinos que pueden contener.
• Los alimentos preparados en puestos ambulantes pueden estar más expuestos a descomposición por efecto del calor. Por eso, prefiere comidas de locales establecidos y que respeten la cadena de frío.

¡Cuídate del sol!:

• Evita exponerte directamente al sol, especialmente entre las 10:00 y las 16:00 horas, pues en ese período la intensidad de la radiación solar es mayor.
• Prefiere siempre la sombra antes que la exposición al sol directo. Si vas a la playa, no olvides el quitasol.
• Usa siempre protector solar con factor (FPS) 30 como mínimo y reaplícalo cada 2 horas o después de nadar, aun cuando el envase diga que es a prueba de agua.

Además:

• ¿No sabes qué ropa usar? Puedes optar por las prendas holgadas y de colores claros. Si estarás expuesto al sol, un gorro o sombrero te ayudará a proteger tu cabeza de la radiación UV y a disminuir la sensación de calor en tu cuerpo.
• Si usas aire acondicionado, evita programarlo a menos de 21°C. La diferencia de temperatura puede provocar enfermedades respiratorias.

El sol y la deshidratación pueden ocasionar serios problemas a la salud. Es por eso que si durante un día caluroso presentas alguno de los siguientes síntomas, te recomendamos acudir a un Servicio de Urgencia.

- Piel roja, caliente y sin sudor

- Palpitaciones

- Dolor palpitante de cabeza

- Mareos y náuseas

- Confusión o hasta pérdida de la consciencia

- Contracción involuntaria de los músculos, como en una convulsión

Fuente: Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades [CDC] (2013)